La mayoría de los gases actuales para la industria de la refrigeración son mezclas de gases. Estas mezclas ayudan a que se utilicen compuestos menos agresivos para el medio ambiente y en particular para la capa de ozono. El objetivo que se persigue en la industria es eliminar al 100% el derrame o liberación de gases contaminantes mediante las prácticas de refrigeración.
Es de vital importante para respetar al medio ambiente que se respete las buenas prácticas de refrigeración en la manipulación de gases. A continuación exponemos los pasos necesarios para una correcta carga de gas a un sistema frigorífico.
Pasos a seguir:
1) Asegurar la hermiticidad del sistema mediante una correcta soldadura de los componentes o mediante ajustes mecánicos.
2) Colocar los manómetros al circuito de baja o a la vávula de carga de gas y presurizar con nitrógeno para comprobar posibles fugas de gases. Dejar un tiempo prudencial bajo presión de nitrógeno el circuito frigorífico para certificar que no existen fugas.
3) Liberar el nitrógeno y realizar alto vacío, menos de 25 pulgadas de mercurio.
4) Colocar el recipiente contenedor de gas en la posición que salga líquido y romper el vacío con la liberación del gas en fase líquida al sistema.
5) Una vez que la aguja del manómetro marque por encima de 0 bar. Encender el compresor.
6) Con el compresor funcionando ir abriendo y cerrando la llave del manómetro para que entre gas al sistema. Repetir este paso hasta que la presión (temperatura de evaporación) de funcionamiento sea la correcta.
7) Cerrar la llave del recipiente contenedor de gas, abrir la llave del manómetro para que el compresor absorba todo el líquido restante. Retirar los manómetros.